Hace unos días me fijaba en cómo muchas veces podemos estar tan inmersos en nuestro trabajo, deberes del día a día o incluso, en nuestros propios pensamientos, que nos olvidamos de apreciar lo que tenemos de frente y ser agradecidos por este momento de mi vida, por esta persona que me ha saludado, por los momentos que puedo disfrutar de mi propia compañía, etc…
Aprovecha cualquier interacción para apreciar, será beneficioso para ti y para quien aprecia.
Así cualquier conversación puede ser deliciosa. Además, puede servir de inspiración para la otra persona!
Es fácil dejarse llevar por el ajetreo y el movimiento constante de nuestra vida cotidiana, cada vez hay más ruido y distracciones que nos desenfocan de nuestro objetivo inicial que es: SER FELIZ.
Es importante dedicar un momento a apreciar y agradecer las situaciones en las que nos encontramos, a menudo damos por sentadas las pequeñas cosas por las que deberíamos estar agradecidos: un amanecer, el sonido de la naturaleza, el calor de un abrazo o simplemente estar rodeados de personas que se preocupan por nosotros.
La clave para encontrar gratitud y poder apreciar cada pequeña cosa que nos rodea, está en centrarse en lo positivo. En lugar de fijarnos en los aspectos negativos de una situación, intentemos centrarnos en las cosas buenas, por muy pequeñas que sean. Esto nos ayudará a mantener nuestra perspectiva bajo control y a cultivar una actitud de aprecio y agradecimiento incluso en circunstancias difíciles.
Cada vez que veas a alguien, busca algo que apreciar, y si te atreves, compártelo verbalmente. Sólo has de cogerlo como costumbre y supondrá un gran cambio en tu vida.
Aprecio de ti que me lees, tu curiosidad, tu deseo de mejorar tu vida y de crecer ♥️
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¡Feliz día!
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